Con Ojos de Niño, nos muestra que para enseñar debemos siempre tener presente la interpretación que el niño le de a la realidad, en base a esto es como debemos trabajar, siempre debemos buscar palabras entendibles y la forma más clara para comunicarnos, para que ellos puedan comprender las instrucciones, ideas o definiciones que queremos expresarles y no haya ambigüedades en su aprendizaje. Para que puedas verlo por ti mismo, te dejo la lectura, sólo da click en la imagen para visualizarla: Tonucci, Francesco. (1994). Con Ojos de Niño. México, SEP. (Libros del Rincón), pp. 56, 60-62, 70 y 72.